El proceso de transformación del vellón de lana en hilo de lana tiene las siguientes fases:
La clasificación de la lana se hace teniendo en cuenta una serie de factores, que dependen tanto de la raza como de las condiciones de cría del animal:
Existen otra serie de factores que disminuyen el valor de la lana, como son la contaminación con plásticos (polipropileno), aparición de plagas u hongos durante su almacenaje y presencia de pinturas, pesticidas o alquitrán en las fibras de lana.
Para obtener un mejor beneficio económico, es conveniente realizar una pequeña selección a la hora del envasado en campo. En esta selección o pre-envasado se deben eliminar todos los posibles restos que contenga la lana, como plásticos, material vegetal, trapos, papeles, materiales metálicos, etc. También es conveniente realizar una separación de las lanas blancas de las de color, y una separación de lanas de 2ª calidad (lana de las barrigas, patas, caras, y pequeños recortes) del resto del vellón. Todos estos procesos mejoran el producto final e incrementan la calidad y precio del lote.
Hoy día, aproximadamente el 50 % de la cabaña ganadera mundial de ovino es explotada para producción de lana. La mayor parte de estas ganaderías pertenecen a la raza merina y sus posteriores cruces con razas autóctonas. Las lanas de mayor calidad son las producidas por ovejas con edades entre tres y seis años, y una oveja produce al año unos 3 kilogramos de lana fina o de 2 a 6 kilogramos de lana gruesa, según razas.
La lana es una fibra natural que, desde antaño, ha sido un producto ovino de gran importancia, llegando a ser la principal fuente de ingresos del ganado ovino en los años 50 y 60. Pero debido a una serie de factores, como la orientación hacia la producción de carne y leche, la contaminación con polipropilenos y otros plásticos, la desprofesionalización del esquileo y principalmente la aparición de nuevos materiales textiles sintéticos, pasó a tener escasa importancia como producto agrícola. En ocasiones, incluso ha llegado a producir pérdidas económicas, ya que el dinero que se obtenía por la lana no cubría los gastos del esquileo. Algunos estudios defienden que si se mejorase la producción lanar aumentando la longitud de la fibra entre un 10 % y un 15 %, y se garantizara la no contaminación de polipropilenos y plásticos en la lana, su precio podría llegar a multiplicarse por dos, incrementando enormemente su rendimiento económico. Hoy día, la normativa vigente (Reglamento 1069/2009) considera la lana como un SANDACH, subproducto animal no destinado a consumo humano, material de Categoría 3.
A partir del año 2010 se ha producido un notable incremento en el precio de la lana, causando un repunte en su mercado. Se ha creado la cooperativa Comercial Ovinos SCL en Villanueva de la Serena (Badajoz), que se encarga de comercializar una gran producción lanar y de incrementar su valor añadido, ya que inician el proceso de transformación, procediendo a su clasificación y prensado. Esta cooperativa agrupa un volumen de ganado de 1.100.000 ovejas de provincias andaluzas y extremeñas, y comercializa 3.300.000 kg de lana al año, con la consiguiente creación de puestos de trabajo y la obtención de mejores beneficios para sus socios.