El ramón lo conforman las ramillas finas y hojas que el ganado consume directamente del árbol o tras la poda. Está compuesto principalmente por fibra y, en menor medida, por proteínas, grasas y oligoelementos. Se trata de un suplemento alimenticio de mantenimiento utilizado principalmente en invierno, y su aprovechamiento es desigual, ya que el caprino puede aprovechar hasta el 85% del mismo, mientras que la oveja sólo aprovecha el 30% (con valores intermedios para vacuno y equino). La producción de ramón depende de diversos factores, tales como la densidad del arbolado y el grado de matorralización de la dehesa.